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dommon

Contragestión

De Mr. Covey

"Trata a tus empleados como si fueran voluntarios y a tus clientes como si fueran los propietarios de la empresa"

 

 

Quién financia a USA?

La frikipedia

Estaba yo haciendo un marketing plan y me he encontrado con esta joya.

A parte de enterarme de que soy un pureta ex-gafapasta y que debería odiar a los modernillos, he encontrado una auténtica mina para entender a mis posibles clientes y entender a esa gente que me encuentro en la cola del cine que no se suben los pantalones a pesar de llevarlos por las rodillas.

Con lo de Bladerunner me han clavado. Que cabrones!

Overengineering

Esta regla me encanta porque suelo romperla para mi pesar. Es especialmente pensada para ingenieros y perfeccionistas.

Asegúrate de que todo lo que haces en el trabajo añade valor a tú empresa. El resto es traerse el ocio al trabajo. Como corolario me gusta decir que de seguir esta regla, todos nos podremos ir antes a casa, ganaremos más dinero (nosotros y las empresas) y disfrutar fuera del trabajo del ocio de verdad.

 

Cómo ejemplo, recuerdo un programador al que le pedí que añadiera un control para añadir la hora de entrega de un pedido. Pasados dos días y visto que nos retrasabamos pegué la oreja y oí que junto a un compañero hablaban de senos, cosenos y radianes. En una aplicación de toma de pedidos para PDA’s me di cuenta de que algo andaba mal.

Para ser breve, llevaba un día de retraso codificando un reloj análógico precioso y la antítesis de la usabilidad. Añadiré que por esa época yo estaba haciendo jornadas de 20 horas.

Countermanagement

Me acabo de inventar (o eso creo) la palabrita de countermanagement o antigestión para definir a aquellos aprendices de brujo que intentando gestionar mejor los negocios e incrementar los beneficios, lo único que hacen es cargarse la gallina de los huevos de oro.

Regla primera: Cuida a tu cliente. Es tu única fuente de ingresos.

El otro día me fui de un restaurante de comida mejicana pensando que no volvería porque la música estaba a un volumen digno de un bar de copas y me dijeron que no podían bajarla auque se lo pedí por órdenes de arriba. Yo me fui antes, eso es cierto; pero también lo es que me lo voy a pensar dos veces antes de volver.

Conclusión: Al gerente de turno se le ha ocurrido aumentar la rotación de las mesas haciendo la atmosfera ligeramente incómoda. Otra variación que he observado es no servir cafés. El siguiente paso puede ser ponerte el segundo plato en la puerta de salida.
Ánimo antigerentes del mundo. Sed creativos.